jueves, 31 de mayo de 2012

Una entrada alternativa

Recogiendo la propuesta de Chordi de hacer una entrada alternativa de la ruta de los pasajes de los cazadores de Hermes, he preparado este post en el que muestro otras miradas de aquel día.
Basta con que prohíban algo...









...para que nadie haga caso:

Alice Pasquini


Btoy


Kram
Si os fijáis a la derecha aparece el archirrepetido chupete. ¿Conseguirá el helado desbancarlo?



Otros aprovechan para decir lo que les da la gana:



Plaza del Elefante


¿Esto lo dice un banquero?


Pintada al lado de la comisaría 
¿Nos estaba mintiendo?
Algunos graffiti están muy currados, otros simplemente son una mierda:


Sí, soy una mierda ¿y qué?
Después de encontrar a Wally en París, ahora lo he encontrado en Barcelona. Lo más curioso es que al hacer la foto pasó por detrás un misterioso individuo con una camiseta a rayas.



Además de los graffiti que habitan en las dos dimensiones, encontramos algunas muñecas y muñecos tridimensionales:





¿No sé cual daba más miedo? Pero lo que sí que es para salir corriendo es el diseño de los timbres de este edificio:




Correr era lo que quería este improvisado ciclista:




Todas las fotos fueron sacadas el mismo día que hicimos la ruta de los pasajes, lo que evidencia que, además de descubrir calles enrejadas, no dejábamos de observar a nuestro alrededor. Barcelona nunca deja de sorprendernos.


Ver también en Milerenda:
La ruta de los pasajes

lunes, 28 de mayo de 2012

Palau Mornau y el Hemp Museum Gallery

El Palau Mornau situado en el Carrer Ample, 35 fue construido entre los siglos XVI y XVII. El palacio toma su nombre de uno de sus antiguos propietarios: José Francisco de Mornau, comisario honorario de los Reales Ejércitos en 1797. En su casa se tramó una conspiración contra la ocupación francesa en Barcelona en 1809. En la entrada hay una placa que todavía recuerda este evento.


En 1908 fue profundamente remodelado por Joaquim Raspall cuando era propiedad de Joan Nadal. La reforma, de aire modernista, es visible tanto en la fachada como en el interior.


En la fachada destaca la tribuna de hierro forjado.





Del patio interior destaca la baranda de la escalera, el farol de forja y la claraboya de vidrio.





Ben Dronkers compró el edificio en el 2001 y encargó al arquitecto Jordi Romeu que hiciera una renovación, poniendo énfasis en el carácter museístico del edificio. Tras una década el edificio está completamente restaurado conservando todas sus características modernistas. El Palau Mornau es parte del patrimonio histórico de Barcelona y es un edificio catalogado.








El Hemp Museum Gallery, inaugurado el 9 de mayo, es un museo hermano del Hash Marihuana & Hemp Museum de Ámsterdam, que fue fundado en 1985 por su director Ben Dronkers. El objetivo del museo es dar una visión más equilibrada e incrementar la conciencia de lo especial de la planta, mostrando su rica historia y su potencial inagotable.

La segunda sala (tras la que explica la historia del edificio) está dedicada a explicar las características de la planta.


El cannabis, domesticada hace 10.000 años, es una planta anual cuya época de floración se produce a finales de verano y depende del viento para diseminar el polen. El cannabis puede cambiar de género ante ciertas condiciones para asegurar la fertilización.

La marihuana es la flor seca de la planta del cannabis hembra no fertilizada. Estas flores crecen formando racimos conocidos como cogollos.


Los pétalos y pistilos producen unos pequeños cristales de resina que protegen a la planta del sol y que contienen los compuestos psicoactivos conocidos como cannabinoides. Tanto las variedades de cannabis sativa como indica producen marihuana.

cannabis indica

cannabis sativa


Hachís es el nombre que se da a la sustancia hecha a partir de los tricomas resinosos y que contienen tan poca sustancia vegetal como sea posible. Esto le da un efecto más potente si se compara en peso con la marihuana.


Francis Carco, 1920. Taberna de hachís en el puerto de Atenas

La siguiente sala está dedicada a las pipas y los métodos de fumar antiguos. Las pipas más antiguas datan de hace 3000 años y proceden de Laos. Durante el siglo XVII se extendió por Europa la costumbre de fumar en pipa una mezcla de tabaco y cáñamo. Aquí se exhiben ejemplares procedentes de todo el mundo.





Las pipas de vidrio soplado son muy populares en América del Norte. Lo que llevó al desarrollo de la industria del vidrio soplado especializada en accesorios de fumar cannabis.


También se expone una colección de grandes maestros especializados en la representación de fumadores de "coffeeshops" de la Edad de Oro.


La siguiente sala está dedicada al procesamiento tradicional del cáñamo. Las flores, las semillas y las hojas se separan golpeando las plantas con palos. Los tallos se dejan en el suelo donde el rocío los empapará o bien en zanjas durante unos diez días. Durante este proceso el líber se separa del núcleo leñoso. A continuación se procede a su secado, ya sea envolviéndolos en ropa o mediante el uso del fuego. La desbrozadora separa las fibras del líber y a continuación una pieza plana de madera acaba de eliminar el material leñoso. Finalmente unos peines de hierro acaban de eliminar los restos de madera de las fibras. Estas fibras están ya preparadas para su posterior procesamiento obteniéndose cuerdas, ropas...





Cristobal Colón no habría podido descubrir América sin el uso del cáñamo. Después de la madera era el material más utilizado. No existe otra fibra natural que resista las fuerzas del mar y los efectos del agua salada. De media las naves de tres palos utilizan entre 60 y 100 toneladas de cáñamo para cabos, aparejos y velas.


A continuación se muestra una infinidad de usos y aplicaciones de la planta, desde papel, biocarbón, aceites, maderas, hasta plásticos de cáñamo. Los precursores de los pantalones Levi's fueron los monos de fibras de cáñamo para mineros.



Seguidamente se hace un repaso de la relación del cannabis con las diferentes religiones y culturas. Por ejemplo, Shiva es una de las divinidades más populares y ampliamente veneradas en el panteón hindú. De acuerdo con el hinduismo, el universo es destruido y creado por la danza de Shiva. Los devotos del dios Shiva le hacen ofrendas de cannabis y fuman para conseguir la comunión espiritual con su dios.


Debido a que uno de los efectos más comunes en los consumidores de cannabis son los cambios en sus percepciones y procesos de pensamiento, éste tiene una larga historia como sustancia que aporta inspiración a artistas, filósofos, escritores, músicos y científicos. Los miembros del club del hachís, organizado por Teophile Gautier, se reunían en el hotel Lauzum de París, para fumar en grupo y experimentar sus efectos.


Incluso Shakespeare describe en uno de sus sonetos una conocida mala hierba y describe un viaje al centro de la cabeza. Recientemente se han descubierto pipas enterradas alrededor de su casa que contenían residuos de cannabis. Este descubrimiento indica que ya en esa época conocían los efectos del cáñamo cuando se fumaba.


La siguiente sala muestra la relación entre el cannabis y la (contra)cultura. Cuando en los años sesenta el movimiento hippy lo reivindicó como propio, paso a formar parte, ya no de una élite de escritores y artistas, si no de la corriente dominante. El efecto relajante y a veces energético respondía al objetivo del cambio social y a los ideales de "paz, amor y felicidad" del "flower power".




La marihuana y el hachís se convirtió en la droga de la cultura mundial con sus propios héroes y mitos, como el de Popeye. ¿Eran realmente espinacas lo que consumía este marinero u otro tipo de hierbas?



Finalmente se analiza la marihuana como droga y como medicina. En la segunda mitad del siglo XIX se reguló en EEUU el uso recreativo y medicinal del cannabis. Pero fue en 1937 cuando la aprobación de una tasa sobre el comercio del cáñamo medicinal e industrial y sobre el consumo y posesión asestó el golpe definitivo y demonizó el producto. Curiosamente los que promovieron estas leyes eran industriales interesados en el nylon y el papel. En 1961, las Naciones Unidas adoptaron un convenio único sobre drogas estupefacientes. En 1971 el presidente Nixon utilizó el término "guerra contra las drogas" por primera vez. La prohibición del cannabis ha continuado en las mismas bases hasta hoy en día. En 2011, destacadas personalidades entre las que se encuentran Jimmy Carter, Kofi Anan o Richard Branson, declararon que la guerra mundial contra las drogas es un completo fracaso y señalaron los efectos negativos de esta lucha.

En la última sala se muestran numerosos envases medicinales del siglo XIX en los que uno de los activos era el cannabis.


El museo del cannabis de Barcelona es el más grande del mundo dedicado al cáñamo. Con una superficie de 900 metros cuadrados, exhibe 6000 piezas. Si esto no fuera suficiente, se encuentra en un edificio cuya sola visita ya justificaría la entrada. Además, actualmente solo vale 5€ por persona (luego costará 9€). Es por todo ello que nos parece un museo muy recomendable.

Para acabar de redondear el día, y dada la proximidad del restaurante, fuimos a comer al Kiosko burguer.


Es un local situado en Marquès de l'argentera, 1bis y suele estar muy lleno. Prueba de ello es que el día que hicimos la salida con los cazadores de Hermes nos fue imposible entrar a pesar de que eran casi las 5 de la tarde. En esta ocasión fuimos al poco que abrieran y pudimos escoger asiento. Primero tienes que pedir en la caja habiendo rellenado un papel en el que marcas tus preferencias y cuando has pagado te dan un número para que cuando salga tu pedido te puedan localizar. Nosotros pedimos un par de hamburguesas, una de pollo y otra vegetariana. Las patatas se piden aparte y también tienes que especificar el tipo de pan.




Mi hamburguesa vegetariana tenía tantos condimentos y guarniciones que apenas la noté. Las patatas nos gustaron mucho. Estaba bueno pero nosotros no somos precisamente de hamburguesas. Curiosamente antes había aquí un restaurante el Wushu que también era modernillo y que solo pudimos ir en una ocasión.

Después de comer tienes que dejar los desperdicios en los contenedores y dejar la mesa despejada para los que vengan después.